Hoy, día de las bibliotecas, os voy a contar la historia de una que me impresionó cuando la visité la pasada primavera, junto con las chicas del blog ¡Qué bello es leer!
Una de las joyas más preciadas de El Casino de Madrid, es su
biblioteca neogótica, realizada en hierro por la cerrajería Asins, igual que la
del Senado. Aunque se construyó para el anterior emplazamiento del Casino, fue
trasladada a su ubicación actual, en la calle de Alcalá, pieza a pieza.
Lo más importante de ella son sus fondos: atesora 36.000 volúmenes
de un sinfín de materias: poesía, narrativa, arquitectura, viajes, así como una
buena colección de revistas, precisó.
Los ejemplares más antiguos datan del
siglo XVI y se extienden hasta la actualidad.
Uno de los más vetustos y
valiosos, de 1611, es El Tesoro de la
lengua castellana, de Sebastián Covarrubias. Todo un hito ya que es el
primer diccionario monolingüe. Se trata del original. También conservan
primeras ediciones de obras de escritores españoles como César o nada, de Pío Baroja; Amadeo
I, de Benito Pérez Galdós; Mi
religión, de Miguel de Unamuno, o Las
Cerezas del cementerio, de Gabriel Miró.
Almudena Gutiérrez |
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