lunes, 30 de septiembre de 2019

Lo que arriesgué por ti



Autora: Marisa Sicilia
Romántica contemporánea
Editorial: Harper Collins Ibérica

Sinopsis:

Dmitry ha dejado atrás París. Ha perdido su negocio, a sus amigos, a la mujer a la que amaba. Los integristas han puesto precio a su cabeza y solo la protección de los servicios de inteligencia ha impedido que cumpla condena en prisión. Pero no a cambio de nada. Si quiere recuperar su libertad, tendrá que encargarse del trabajo sucio, la clase de misiones solo aptas para hombres sin escrúpulos, hombres de los que prescindir cuando dejan de ser útiles. Por eso no es buena idea enfrentarse a Antje, su supervisora en Berlín y la mujer que con una sola palabra puede hacer que sea expulsado del programa o que su vida carezca de valor. No, no deberían mezclar sexo y trabajo ni llevar su relación al límite. No pueden confiar el uno en el otro, ella está acostumbrada a ejercer el control, se aferra a los protocolos y las normas, ha llegado alto y se ha vuelto dura por el camino. Además, la prioridad es la amenaza terrorista que se cierne sobre toda Europa y pone en jaque a Berlín.
No, no encajan, ya salió mal otras veces, pertenecen a mundos muy distintos, no pueden permitirse que las emociones pongan en peligro todo lo demás, pero ¿y si lo arriesgan todo?

La autora:


Marisa Sicilia comenzó a escribir un buen día de julio de 2010, convirtiéndose en una adición que la ha llevado a publicar ocho novelas. Le gusta cambiar de época, variar los esquemas, tratar de sorprender y, con un poco de suerte, conseguir emocionar.
Le parece muy divertido escribir novelas y le gustaría más que también lo fuese leerlas.

Si queréis saber más sobre ella y conocer todos sus títulos, podéis visitar su blog http://marisasicilia.blogspot.com/



Mi opinión:

Empiezo por decir, una vez más, que catalogar las novelas es muy complicado. Cuando se habla de una autora romántica, se tiende a pensar en una historia de amor y poco más. Pero leer a Marisa Sicilia supone todo lo contrario.

En esta novela, una trama política-policial, con los servicios secretos de Francia, Alemania y Rusia en juego, contándonos con todo lujo de detalles el difícil mundo en el que nos movemos, el terrorismo internacional, el peligro yihadista, la forma que utilizan para radicalizar a jóvenes nacidos y educados en Europa, los asesinatos o desapariciones considerados por los servicios secretos, daños colaterales, las ollas a presión que son los equipos antiterroristas…Todo esto nos cuenta la autora, con una magnífica labor de documentación y mostrándonos la ciudad de Berlín con una fidelidad tal, que paseamos por sus parques, entramos en sus edificios, en sus despachos o en las naves abandonadas, convirtiendo la ciudad en un personaje más.
Olemos la sangre, nos duelen las palizas, percibimos la crispación, el peligro, el doble juego de casi todos.

Y en medio de todo eso, Dimitri —Dima— y Antje, se atraen y se odian, a partes iguales, con un magnetismo exclusivamente sexual, que les lleva a protagonizar unas cuantas escenas eróticas, muy bien resueltas por la autora, bastante subidas de tono pero muy necesarias en el hilo argumental.

Como habréis leído el encabezamiento: romántica contemporánea, lo demás os lo podéis imaginar sin que yo os lo cuente pero, insisto, esta novela es mucho más y puede incluso defraudar al lector que vaya buscando una romántica al uso.
Para rematar la novela, varios giros inesperados y un epílogo sorprendente, redondean una historia en la que cuesta entrar por la cantidad de personajes y de información pero cuya lectura nos absorbe. 

En cuanto a los personajes, es muy curioso que en casi todas las novelas de esta autora, me gustan más los personajes masculinos, su forma de ser y de actuar, me resultan mucho más creíbles que los femeninos.
A Dimitri, el protagonista, Marisa Sicilia lo ha perfilado con todo detalle, pero si queréis conocerle mejor, os aconsejo leer primero Nadina o la atracción al vacío.

Merece la pena darle una oportunidad a Dima, no os va a defraudar.

Almudena Gutiérrez


El otoño que quiere llegar a mi tiempo



Nuevamente Ferrán Garrido, periodista, escritor y amigo de este blog, nos cede un poema suyo para publicar en los relatos de los lunes.

Nos habla de un otoño especial.



El otoño que quiere llegar a mi tiempo
se abre camino entre los encantos del recuerdo.
Me mira a estos ojos que salieron de un invierno
y conservan, de una primavera, el azul del viento.

En las aguas del estanque nadan vivos
los recuerdos de los otoños que de niño
viví feliz junto a sus aguas de eterno verano
para llevarme a ti en un camino de retorno.

Y me veo en tus ojos de deseo,
de vida, de paz, de amor y de sosiego,
en la fuerza de la carne que tiembla en su fondo
como el agua del estanque tiembla con el viento.

Y te veo tan dentro de esos ojos,
unos ojos tan limpios
que no les caben, ni las sombras del otoño,
ni pesares abrumados.

Acaba septiembre con las luces del verano,
vendrá un octubre de nieblas con su manto,
y llegará un noviembre de colores congelado.

Pero este otoño es azul, amor,
de luces y alegría coloreado,
porque este otoño quiere llegar de tu mano.


Del Poemario Inédito de Ferran Garrido
Fotografía Pedro Ignacio Fernandez



PASAR PÁGINA número 21




viernes, 27 de septiembre de 2019

Aroma de vainilla de Isabel Martínez Barquero



 
Sinopsis:

En el umbral de la ancianidad, Mercedes Ortega Abellán distrae los grises momentos de su existencia presente acudiendo al refugio de su memoria, donde los recuerdos la conducen a un viaje hacia el pasado. Su mirada retrospectiva desvela los secretos de tres generaciones familiares y consigue que encuentre el vigor preciso para cambiar el rumbo de los acontecimientos en las vivencias de una estirpe no rendida ante las desgracias.

La brújula de la fiel memoria de Mercedes abarca desde los últimos años del siglo XIX hasta los años sesenta del siglo XX, asiste a la epopeya de una familia que se extingue en una provincia del sur de España, concurre a las vicisitudes existenciales de mujeres fuertes, de hombres tiernos, de hijos con filiaciones muy diversas e inclinaciones muy distintas y de mentes abocadas a la locura por las circunstancias políticas y sociales de la época.

Los ejes temáticos giran en torno al deseo amoroso, el amor insatisfecho, el amor no correspondido y el traicionado, los celos, el adulterio, los conflictos generacionales, los estigmas de una educación estricta, el orgullo, la tozudez, las murmuraciones sociales, la fascinación por la cultura, la ferocidad de la guerra y sus nefastos efectos posteriores, el perdón, la generosidad, los sueños no cumplidos, las expectativas rotas, el oscurantismo religioso y su antítesis descreída e iconoclasta, la locura, la muerte y la lucha por la existencia en una España llena de rencores y de atmósfera opresiva.

La autora:

Isabel Martínez Barquero nació en Murcia. Escribe novela, relato y poesía. Ha publicado las novelas La historia de los mil nombres, Aroma de vainilla, Diario de una fuga y La gloria venidera; los relatos Linaje oscuro, El cauce de los días y Mujeres de otoño y los poemarios Lunas de ausencia y El nervio de la piedra.

Mi opinión:

Mercedes Ortega Abellán nos cuenta una historia que abarca desde finales del XIX hasta los años sesenta del pasado siglo XX y que se desarrolla en Murcia y su región.
Sus recuerdos nos adentran en la vida de las familias Ortega y Abellán y, sobre todo, en la de tres mujeres, Julia, Mercedes y Berta, abuela, hija y nieta.

Mercedes, en su narración, va dando continuos saltos en el tiempo, pero no por eso dejamos de comprender lo que nos está contando, una historia de amor y desamor, de secretos, de verdades a medias en una sociedad encorsetada por las rígidas normas que rigen en ella, primero, y por la opresión de la dictadura, después de la guerra.

En algunos momentos resulta una lectura un poco densa, con demasiados detalles de especias, plantas o condimentos, pero no impide que nos apetezca continuar con ella. El lenguaje, muy cuidado con los diferentes tiempos en los que se desarrolla la historia.

Como ya he dicho antes, es una novela de tres mujeres protagonistas pero hay otra que se me ha quedado grabada: «La echá palante», o Regina, como se llama en realidad. Creo que siempre recordaré a esta mujer, noble y buena, a la que la vida se lo pone muy difícil.

También me ha encantado Segundo Ortega, que desprende el olor a vainilla que da título al libro y que ama como pocos hombres pueden amar a una mujer.

Es, en conclusión, una novela de personajes y de sus sentimientos, que no podemos pretender entender con la mentalidad del siglo XXI, simplemente hay que disfrutar de su lectura.

Almudena Gutiérrez


martes, 24 de septiembre de 2019

Cuéntame una noctalia


Autora: Mónica Gutiérrez.
Autopublicada

Este libro, a pesar de ser la ópera prima de Mónica Gutiérrez y de haber leído todos los que ha escrito con posterioridad, estaba esperando su momento y lo encontré cuando buscaba una lectura que supiese, con toda seguridad, que no me iba a decepcionar.

Como ha demostrado después, es una maestra del feelgood, y en esta novela ya se perfila como tal. Yo lo calificaría como un cuento con un bonito romance que es, en realidad, lo menos importante de la historia.

Sinopsis:

Grace vive en Londres y trabaja como cirujana de éxito en uno de los hospitales más prestigiosos de la ciudad pero se siente sola. En vísperas de Navidad decide volver a su pueblo natal, una pequeña aldea de Transilvania, donde viven sus abuelos y su padre. Grace se reencuentra con su infancia, con una vida plena y feliz, con su familia. Pero además de los excéntricos vecinos del pueblo, la mula de Cesare, el cotilla del farmacéutico y los misterios de su padre y su hermana, Grace va a encontrarse con algo que no esperaba y que trastocará todos sus planes.

La autora:

Mónica Gutiérrez se define a sí misma: «Soy escritora, historiadora, periodista, profesora, alumna, lectora recalcitrante, bebedora de té, amiga, viajera, soñadora, despistada…»
Ha publicado cinco novelas feelgood: Cuéntame una noctalia, Un hotel en ninguna parte, El noviembre de Kate, La librería del señor Livingstone y Todos los veranos del mundo. También colabora como redactora en La Piedra de Sísifo, un gabinete de curiosidades literarias, e imparte talleres de escritura feelgood y otros cursos para escritores en Ateneo Literario.

«Las noctalias son los cuentos que se explican desde siempre alrededor de un buen fuego. Para que sea una verdadera noctalia, deben darse tres descripciones indispensables: que sea de noche, que haga frío y que todos los que estén escuchando estén cansados. Solo así la noctalia da consuelo, porque siempre encierra un mensaje de esperanza. Como un faro, una luz cálida, para los que están perdidos o exhaustos, en busca del camino.»

Mi opinión:

Una novela de quince capítulos que comienzan con las noticias contadas por Georghe, desde su pajar. El pequeño pueblo de poco más de trescientos habitantes, Mic-Napoca, en Transilvania, es un lugar lleno de lugareños muy peculiares que la autora nos va presentando, con pocas palabras, hasta llegar a conocerlos perfectamente.

Narrada en primera persona por la propia Grace, nos enamora del pueblo y de sus gentes, página a página. Yo he tomado un delicioso café en el Sinaloa, servido por Teresa, que ha sabido, sin ninguna duda, que no me gusta el chocolate.

He paseado por Mic-Napoca, contemplando un magnífico paisaje, he escuchado a la abuela frente a la chimenea. Me encanta la Navidad, he disfrutado con los preparativos y las tradiciones, y he participado adornando el árbol con las dos hermanas.

Y, cuando me he querido dar cuenta, mi lectura se había terminado, dejándome como siempre que leo a Mónica Gutiérrez, una inmensa sonrisa y  la sensación de haber estado unos días de vacaciones en Mic-Napoca.

No dejéis de leerla
Almudena Gutiérrez








lunes, 23 de septiembre de 2019

Perdóname de Pilar Muñoz


Pilar Muñoz Álamo vuelve a cedernos un precioso relato para este primer lunes de otoño.
Si todavía no conocéis su obra, podéis visitar su blog Ellas también viven y encontraréis todas sus publicaciones, la última, «Aquello que fuimos»,  es la ganadora del V Premio Literario de Amazon.






Perdóname


Vuelvo a casa, arrastrando los pies sobre los adoquines mojados, pisando mi propia sombra que la luna proyecta delante de mí. Una pareja se besa, rozándose los labios con la timidez de un primer encuentro. Otra camina entrelazando sus manos, con la felicidad balanceando sus cuerpos al tiempo que se sonríen, sin hablar. Hay luces encendidas en las ventanas, siluetas de vida tras las cortinas. Susurros en los portales.

Al subir las escaleras, escucho el eco de mis pasos solitarios; ya no tienen quien los acompañe. Tampoco quien los espere bajo el quicio de la puerta junto a un beso deseoso de alcanzar mi boca. Mi corazón se estrecha, susurra y se lamenta. Por mi maldita inconsciencia.

La oscuridad me recibe aferrada al silencio. Me quito los zapatos y camino descalza para no importunarlo, y aun así la nostalgia despierta y me sale al encuentro. Me me parece aspirar su aroma y me ahogan los recuerdos que dejaron de sumar. ¿Dónde estará?

Un juego tenue de luces y sombras traspasa el umbral de mi habitación. Mis pupilas se encienden, mi pulso crepita. Avanzo con el alma en vilo, temiendo disipar la magia que mi mente adivina, dispuesta a soñar. Hay velas encendidas, sándalo en el aire. Y una rosa de papel en la cama. Siento ganas de llorar.

La sujeto entre mis manos y luego, la acuno en mi pecho tras leer nuestros nombres tatuados en las hojas de su tallo. Un suspiro corta el aire y que me quedo quieta, no me muevo. Es mi respiración la que ahora se agita. La que me revela que él está detrás de mí.

Sus manos me recorren la cintura, su aliento se aposenta en mi nuca. Y mis ojos se humedecen cuando mi cuerpo estrecha, cuando un desfile de besos acomoda en mi cuello como hiciera antaño tantas veces antes de desnudarme.

Enmudezco. No quiero hablar. Prefiero entregarle mi alma, deseo redimirme.

Me susurra que me quiere mientras cae la ropa al suelo. Sus caricias me estremecen, mi corazón revive. Y mi conciencia le grita «te amo» hasta quedar sin voz. Nos enredamos entre sábanas, desnudos en cuerpo y alma. Con el deseo arrebolado por la ovación de sentimientos reencontrados. Fundidos hasta el amanecer.

Cuando la luna se apaga y él todavía no duerme, le susurro al oído:
«No me dejes nunca. Perdóname».


©Pilar Muñoz Álamo - 2016.



martes, 17 de septiembre de 2019

La novia gitana


Autora: Carmen Mola
Editorial Alfaguara

Sinopsis:

«En Madrid se mata poco», le decía al joven subinspector Ángel Zárate su mentor en la policía; «pero cuando se mata, no tiene nada que envidiarle a ninguna ciudad del mundo», podría añadir la inspectora Elena Blanco, jefa de la Brigada de Análisis de Casos, un departamento creado para resolver los crímenes más complicados y abyectos.
Susana Macaya, de padre gitano pero educada como paya, desaparece tras su fiesta de despedida de soltera. El cadáver es encontrado dos días después en la Quinta de Vista Alegre del madrileño barrio de Carabanchel. Podría tratarse de un asesinato más, si no fuera por el hecho de que la víctima ha sido torturada siguiendo un ritual insólito y atroz, y de que su hermana Lara sufrió idéntica suerte siete años atrás, también en vísperas de su boda. El asesino de Lara cumple condena desde entonces, por lo que solo caben dos posibilidades: o alguien ha imitado sus métodos para matar a la hermana pequeña, o hay un inocente encarcelado.
Por eso el comisario Rentero ha decidido apartar a Zárate del caso y encargárselo a la veterana Blanco, una mujer peculiar y solitaria, amante de la grappa, el karaoke, los coches de coleccionista y las relaciones sexuales en todoterrenos. Una policía vulnerable, que se mantiene en el cuerpo para no olvidar que en su vida existe un caso pendiente, que no ha podido cerrar.
Investigar a una persona implica conocerla, descubrir sus secretos y contradicciones, su historia. En el caso de Lara y Susana, Elena Blanco debe asomarse a la vida de unos gitanos que han renunciado a sus costumbres para integrarse en la sociedad y a la de otros que no se lo perdonan, y levantar cada velo para descubrir quién pudo vengarse con tanta saña de ambas novias gitanas.

La autora:

Nada se sabe de Carmen Mola, solo hay conjeturas y sospechas. Tal vez algún día podamos conocerla, aunque en declaraciones a ABC, por correo electrónico, confesó: «Me gustaría que nunca nadie descubriera quién soy, tal vez que un día Carmen Mola desapareciera sin más»

Mi opinión:

Es una novela que se aleja de lo que acostumbro a leer. Reconozco que es adictiva, aunque resulta asquerosa y se recrea en exceso en esa asquerosidad.
Por otra parte, la policía que investiga los casos, Elena Blanco, me ha caído mal desde la primera página. No me agradan las personas que esconden sus penas tras el alcohol, y no me parece que puedan rendir como deben si se han estado bebiendo grappa hasta altas horas de la madrugada.

Dividida en cinco partes, con capítulos muy cortos, cada una de ellas se inicia con la angustiosa narración de un niño encerrado en una nave, que está claro que va a tener algo que ver con el caso…

La investigación policial se mezcla con la extraña vida de la inspectora Blanco, que oculta un tortuoso secreto que, según va avanzando la novela, va dejando claro al lector que no se va a descubrir y nos confirma, en la última página, que deja abierta la historia para una segunda novela. Eso ya no me gusta, no me parece bien que se esté todo el libro «jugando» con lo que el lector no sabe, para dejarle con la miel en los labios para una próxima entrega. De hecho, esa subtrama podría, perfectamente, no existir.

En cuanto al caso de Susana Moncaya, la trama principal, es demasiado rebuscado. Me ha dado la impresión que la autora ha pensado primero en algo que fuese diferente a todo lo escrito y, a partir de eso, ha creado una novela.

Me han parecido interesantes los planteamientos que hace sobre la corrupción policial y la presión mediática, el chantaje emocional, los traumas... Como madrileña, me agrada leer novelas que recorren lugares conocidos de mi ciudad.

Mi conclusión es que si no fuese por la peculiaridad del método elegido para matar y la poco habitual personalidad de la protagonista, esta novela no habría alcanzado la fama que ha tendido, aunque eso ya tiene mérito.

Yo no creo que repita con esta autora, se recrea demasiado en la podredumbre humana.

Por cierto, está confirmado que habrá adaptación para la televisión, y será, si es fiel al original, muy fuerte.
 
Almudena Gutiérrez



lunes, 16 de septiembre de 2019

Hojas para el recuerdo


Parece que el otoño se quiere instalar en nuestras vidas y he elegido un relato en el que caen las hojas de los árboles, con un paisaje parecido al que vamos a empezar a ver en cada rincón.
Pilar Muñoz, con la generosidad que la caracteriza, nos ha cedido unos cuántos para ir publicando en este blog, pero si queréis leer más o conocer su obra, no dudéis en visitar su blog literario Ellas también viven.

«Hojas para el recuerdo»

En este banco del parque me declaraste tu amor, en una noche preñada de luna llena, ¿te acuerdas? Yo era una jovenzuela loca y tú un donjuán de tres al cuarto, descarado y guapetón, pretendido por las mozuelas de mi escuela y de mi calle a espaldas de sus papás, porque labia te sobraba, pero te faltaban los billetes con los que conquistar sus corazones ignorantes de emoción. Yo rehuía tu presencia por esa pose altanera y tu falta de humildad, creyente de que tu cara bonita sería un pasaje hacia una felicidad soñada junto a una dama y señorita como yo. Qué ilusa fui. No supe que al no mirarte me convertiría en un reto, en una meta por conquistar. Que plantarías tu bandera en mitad de mi corazón tras conquistarlo como Neil Armstrong la luna. Sin podérmela arrancar en los once lustros que vivimos juntos. Ni siquiera cuando me dijiste adiós.

Caen las hojas de los árboles y me acarician las piernas, con el mismo roce suave con el que tus manos se aventuraban en esa época de juventud. Los ojos encendidos, la boca prieta. Y el ansia por poseerme cristalizando en tu piel. Qué sofocos me subían. Me palpitaba el pecho, aunque no te lo confesara; no podía permitir que antes de nuestras nupcias mancillaras mi virtud, que me pusieras en boca de las demás. Y ahora río y descubro que fui tonta. Por acallar un instinto placentero vetado sin argumentos por aquella sociedad; por ignorar esa naturaleza animal que Dios nos dio para algo más que para procrear.

Ahora tengo un pretendiente, a mis ochenta, mira tú. Me tiemblan las manos cuando lo veo, pero no puedo asegurar que las mueva la emoción y no la edad. Me toco el pecho y mi corazón no baila al pronunciar su nombre, aunque me reconforta su compañía. ¿Acaso será por la soledad?

Dudo si quedé privada de sentimientos, si estos cayeron al suelo dejándome las entrañas huecas como un árbol muerto, sin brotes nuevos, sin savia alguna que los haga florecer. Si te los llevaste tú a ese lugar sin nombre en el que me esperas.

Dudo si consentirle a este nuevo hombre que me dé su amor. Si guardar tu ausencia, según me educaron. Si dejarás de quererme por considerarlo traición.

Dudo si volver a sentarme en este banco, porque los recuerdos me matan. O dejar para siempre que las hojas me acaricien. Como si fueras tú.

© Pilar Muñoz Álamo – 2018





lunes, 2 de septiembre de 2019

El relato de los lunes



Es lunes 2 de septiembre y volvemos con la costumbre de publicar un poema o un relato que nos prestan los escritores amigos para traer a este blog.

Jose Ramón Bofill, autor de Mundos paralelos y otros relatos, ha tenido la amabilidad de cedernos este poema.






Morir en tus brazos
una tarde de estío
junto al mar.
Apagar la mirada en el mar en calma,
en las olas lejanas,
en las suaves ondas planas
de arena y de azul
como tu vientre.
Confundir el murmullo de tu voz
y tu arrullo con la espuma del mar.
Sentir tus caricias, tu última caricia,
como la brisa postrera del aire y del alma,
y que tus manos eternas paralizan el tiempo
y eternizan el beso de la mirada final.

                                                                                                                             José Ramón Bofill