Diego vivía con una herida; Elora le demostró que toda herida puede sanar.
A Diego Márquez le duele siempre la cabeza y tiene claro que es por culpa de Ángel, su padre. Lleva unos meses imponiéndole una condición: si quiere evitar que ceda a su nueva madrastra las acciones que le corresponden de la empresa familiar, deberá casarse en un breve plazo de tiempo. Algo bastante difícil, porque Diego no tiene el mejor carácter del mundo.
A él esto le parece un disparate, pero necesita salvar su
negocio y, desesperado, le propone matrimonio a su empleada de hogar, Elora,
convencido de que lo mandará a paseo. Sin embargo, la chica le promete pensarlo
si él cumple su propia condición.
Un viaje a Mykonos, un convento, un detective privado
medio chiflado, una monja muy particular y un padre angustiado completan esta
historia llena de mensajes positivos, de atardeceres y de la luz del
Mediterráneo.
Mi opinión:
Esta autora nos tiene acostumbrados a introducir en sus
historias de amor temas sociales pero, en esta, se ha superado.
La historia de Diego y Elora podría haber sido una más,
ejecutivo guapetón y muchacha de una esfera social muy inferior, empleada de
hogar, bajita y redonda, que se terminan enamorando. Por supuesto, para llegar
al final, pasan muchas cosas, como es lógico, incluido un viaje a Mikonos, tan
bien descrito que, al acabar la lectura, nos apetece ir a esa isla en nuestro
próximo destino vacacional.
Pero lo que hace esta novela diferente es Elora. Mayte
Esteban se ha atrevido con un tema muy complejo: la vida de una niña no querida
en su entorno familiar, porque los lazos no implican el cariño, que acabará en
pisos tutelados, esos de los que no nos gusta hablar pero que están ahí y que
han saltado recientemente a la actualidad. Elora sufrirá tanto que le dejará
unas heridas difíciles de sanar, aunque ella pondrá un faro en su vida, porque
siempre hay que buscar la luz en la oscuridad.
El tratamiento que Mayte Esteban ha hecho de este tema es
tan bueno que, solo por eso, merecería la pena leer Tus primeras veces
conmigo. Un perfil psicológico impecable, totalmente realista, consigue que
Elora se quede grabada en la memoria como ejemplo de fortaleza, de bondad y de
superación.
Cada una de las primeras veces están muy bien narradas,
incluidas las sexuales, contándolo todo en su justa medida.
Diego me ha gustado. Los que padecemos de jaquecas o
migrañas, sabemos lo invalidante que puede ser un dolor de cabeza y lo que
amarga el carácter. No es extraño que, con el mal momento personal por el que
atraviesa, sumado a esos horrorosos dolores de cabeza, no sea el mejor jefe y
tenga amargadas a secretarias y empleadas del hogar. Resulta un personaje muy
real, con el que te encariñas rápidamente.
A lo largo de la historia se tocan otros temas como las
adicciones, los engaños, la ambición desmedida y las consecuencias de las malas
decisiones, cuando se toman con la ceguera de las pasiones y las vanidades.
Sobre los personajes secundarios, pocos, que rodean a la
pareja protagonista, me ha gustado mucho Alicia, de la que habría querido
conocer más y el pintoresco detective.
Los diálogos, muy buenos, en esto Mayte Esteban es especialista y la cubierta de las que llaman la atención a primera vista.
Es una historia agradable con un tema de fondo muy profundo.
Os invito a leer esta novela porque, sobre todo, merece la pena conocer a Elora.
La autora
Si queréis conocer mejor a la autora, os invito a conocer su blog El espejo de la entrada
Almudena Gutiérrez |
¡Me encanta que hayas entendido tan bien a Elora! Gracias por dedicarle un tiempo a la novela y un espacio aquí.
ResponderEliminar¡Qué gusto leer a Mayte! Deseando estoy hincarle el diente a este nuevo título. Lo mejor es que este año estamos de enhorabuena porque me parece que para verano tenemos otra sorpresa de la autora. Besos.
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