Siglo primero a. C. Kara, una joven ibera, sobrevive milagrosamente a la masacre perpetrada por el ejército romano sobre Libisosa. Marcela, en Carthago Nova, conocerá al culpable de la matanza. Dos mil años después, Noelia es arqueóloga en el yacimiento donde comenzó todo mientras se sobrepone a una tragedia personal. Tres mujeres, un destino, ¿te atreves a descubrirlo?
La autora:
Ha publicado Las hijas de Banú, Barridas por el salitre, El tiempo sin ella, Los círculos del alma, El legado de Ava y Anacronía de una marquesa, con estos dos últimos fue finalista del premio literario de Amazon de 2017 y 2019, respectivamente.
Mi opinión:
Tres historias, tres mujeres: Kara, Marcela y Noelia.
Dos hilos temporales que se irán alternando, el siglo I a C y el año 2009. Veintidós capítulos en los que se alterna la narración de cada una de estas tres mujeres, a las que les une el sufrimiento que han padecido por diferentes motivos.
La historia se inicia con la masacre que sufrió Libisosa a manos del ejército romano y que ahora descubrirá Noelia en unos trabajos de arqueología.
Amor, amistad, odio y rencor, todo cabe en esta historia de secretos que iremos descubriendo, con un importante giro en la trama que nos dejará boquiabiertos.
La autora ha querido dar visibilidad al yacimiento de Libisosa, población íbera, romana y medieval, en la localidad de Lezuza, Albacete.
La ambientación histórica es sobresaliente, el papel de la mujer, que no era dueña de su vida, el comercio, las esferas sociales, las esclavas, las depravaciones conocidas y consentidas…Todos los personajes tienen su importancia, todos muy bien recreados.
Las reflexiones del centurión, con las que se inicia la novela, las recordaremos al final, ese que, no por esperado, aminora su crudeza.
Una novela escrita con gran sensibilidad.
Almudena Gutiérrez |
No hay comentarios:
Publicar un comentario