martes, 29 de octubre de 2024

ESTUVIMOS ALLÍ Presentación de «La isla de la mujer dormida»

 

El teatro Fernando de Rojas del Círculo de Bellas Artes, ha sido el lugar elegido por Arturo Pérez Reverte para presentar en Madrid su última novela La isla de la mujer dormida, editada por Alfaguara.

Acompañaban al autor su editora, Pilar Reyes y el actor Luis Zahera, que ha leído fragmentos de la novela.

A lo largo de casi una hora y media, el autor nos ha contado el camino que emprende cada vez que comienza una novela, un nuevo viaje, un desafío. En su cabeza hay muchas historias, pero siempre busca una que le permita moverse en un territorio que le guste, por el que va transitar durante un año o un año y medio.

Realmente, se lleva moviendo por territorios parecidos desde hace casi cuarenta años, a lo largo de 34 novelas, pero su cabeza ha cambiado, por lo que se acerca a los lugares de una manera diferente. Ahora vive en una saludable incertidumbre que le ha dado la edad.

Ha comentado que se siente más mediterráneo que español, nació en Cartagena y se escapaba del colegio para irse al puerto, que le fascinaba. Realmente, con esta novela está volviendo al refugio de su infancia, al mar, a los barcos, a los marinos. «Siempre que puedo meto el Mediterráneo en mis historias».

La isla de la mujer dormida es una historia de corsarios modernos. «Como novelista, me disfrazo y juego a los corsarios. Me monté una operación militar, imaginar me apasiona, me lo paso bien, y pretendo que el lector viva lo mismo que he vivido yo imaginando la historia».

La Guerra Civil Española se ha utilizado como decorado, porque no se posiciona todo es mucho más complicado que blanco o negro, el mundo es ambiguo, es una escala de grises.

Dentro de la novela bélica, hay otra novela con el mismo peso narrativo, un complejo triángulo amoroso.

Estamos ante una historia, en palabras de su autor, con nostalgia y con una gran capacidad de conversación con el presente.

«Tengo que llevar al lector a mi territorio, envolverle, hacerle una emboscada»

Para finalizar nos cuenta cómo se encuentra cuando acaba de escribir un libro, «tengo la misma sensación de vacío que el que sientes cuando una mujer que amaste mucho, te deja, no soporto ese vacío y por eso comienzo otra novela inmediatamente».

Arturo Pérez Reverte ya está viviendo otro apasionante viaje, el viaje que nos ha presentado esta tarde, ya está en manos de sus lectores.

Almudena Gutiérrez

sábado, 26 de octubre de 2024

ESTUVIMOS ALLÍ: Presentación «Entre hilos de silencio» de Pilar Muñoz



El pasado jueves 24 de octubre, tuvo lugar la presentación en Madrid de la novela Entre hilos de silencio, de Pilar Muñoz.

La librería Odisea Espacio Cultural, nos acogió con los brazos abiertos y propició un ambiente de intimidad para dialogar sobre una novela intimista, de personajes, con un buenísimo contexto histórico.

Comenzó presentando Elisa Mesa, editora de Harper Collins Ibérica, ya que la novela se ha publicado con su sello HarperF.

Marina Collazo, nuestra subdirectora, fue la encargada de acompañar a la escritora Pilar Muñoz, en un distendido diálogo que iba desgranando todo lo que se podía contar sobre la trama y sus personajes.

A los asistentes nos pareció muy curioso la forma en la que la historia fue escrita, primero la línea temporal «antigua» que abarca más de cuarenta años y después la más actual y que se desarrolla en tan solo unas horas, el 31 de diciembre de 1999. Para escribir la segunda, fue «tejiendo» los recuerdos para que pudiesen encajar a la perfección con la primera.

Pozoblanco es su pueblo y ya se merecía figurar en una de sus novelas pero, además, tiene una importante historia detrás: en los tres años de guerra, fue el único pueblo de la serranía cordobesa que se mantuvo fiel a la república casi hasta el final, lo que supuso unas represalias durísimas en la posguerra que sumieron al pueblo en la pobreza y el olvido. No obstante, esto es solo el contexto en el que Pilar Muñoz ha narrado su novela, su historia es otra, protagonizada por mujeres fuertes, más fuertes de lo que nunca se imaginaron ser en el mundo en el que les tocó vivir.




Vivimos una tarde de detalles, de reencuentros, de abrazos, de firmas...

Acabo con unas palabras de la autora:

«Permitidme que en esta ocasión también le de las gracias a la mujer que llevo dentro, que se rebela y lucha por darle voz  a un sueño con la fuerza y el tesón de quien siempre termina creciéndose ante las dificultades»

Almudena Gutiérrez




miércoles, 16 de octubre de 2024

Recordando la entrevista a Paloma Sánchez Garnica

 

Ayer, 15 de octubre de 2024, Paloma Sánchez Garnica se alzó con el Premio Planeta con su novela Victoria.

Hoy recordamos la entrevista que  le hicimos a Paloma cuando, en 2021, quedó finalista del premio y que fue, según ella declaró anoche, el germen de esta novela ganadora.



AG. Estamos encantados de tenerte nuevamente en nuestras páginas. Felicidades por ser la finalista del premio Planeta, ya te adelantamos que la novela nos ha gustado muchísimo.

¿Por qué decidiste presentarte al premio?

PSG. Porque uno siempre sueña con llegar a conseguirlo, y cuando vi la novela que tenía entre manos, pensé, por qué no, vamos a intentarlo…

AG. ¿Qué pasó por tu cabeza cuando viste que te habías convertido en finalista, y que habías estado tan cerca de ganar?

PSG. Pensé, «disfrútalo, Paloma, disfruta este momento».

AG. ¿El juicio mediático que se ha hecho a Carmen Mola, te ha beneficiado o te ha perjudicado?

PSG. Yo creo que me ha beneficiado porque se habló muchísimo y durante mucho tiempo del Premio, y eso es puro marketing…

AG. ¿Qué te está deparando esta gira tan especial con los «tres chicos» que firman como Carmen Mola?

PSG. La posibilidad de conocer a tres buenas personas, divertidos, generosos, respetuosos y muy interesantes. Gente así es la que te enriquece la vida… He tenido suerte con ellos; son muchas horas de convivencia…

AG. Vamos a hablar de tu novela. Ya habías tocado el tema de la II Guerra Mundial en La sospecha de Sofía, ¿es un tema histórico que te interesa más que otros?

PSG. No la guerra en sí misma, las trincheras o el conflicto, sino el efecto que provoca en personas corrientes, y no solo el periodo de la guerra, que me interesa poco, sino más bien los previos y las consecuencias, por qué se llegó a ese horror, que es el tema de Últimos días en Berlín, así como sus consecuencias en el tiempo en el caso del Muro de Berlín que cuento en La sospecha de Sofía.

AG. En esta obra cuentas narras dos regímenes totalitaristas del siglo XX, el de Hitler y el de Stalin, ¿por qué estos dos temas? ¿cómo te has documentado?

PSG. Porque fueron las dos tendencias políticas más destructivas de la historia de la humanidad. Mi documentación es la lectura, consultar ensayos políticos, históricos y biografías, leer novelas sobre la época, diarios de gente que dejó escritas sus experiencias vitales; además de visualizar películas y documentales muy descriptivos. Pero lo fundamental en mi documentación es la lectura.

AG. ¿Por qué elegiste que el peso de tu historia se centrase en personas corrientes?

PSG. Porque es lo que me interesa conocer a través de la escritura. Creo que la literatura, las novelas, la ficción, es la mejor herramienta para entender mejor cómo somos y por qué somos; es una herramienta perfecta para establecer un diálogo con el pasado que nos permita comprender y aprender de dónde venimos, cómo vivieron gente como cualquier de nosotros una época concreta, cómo gestionaron su vida con unas leyes, costumbres y con unos prejuicios determinados. Eso es lo que me interesa a la hora de escribir, entender la intrahistoria a través de seres humanos corrientes en su cotidianidad.

AG. En tu novela has puesto mucho énfasis en los personajes, nadie sobra, cada uno tiene su papel. ¿Cómo los creas?

PSG. No tengo un guion, ni un argumento, ni hago esquemas previos; me dejo llevar por la escritura; simplemente escribo… Eso sí, tengo que ser muy disciplinada y ponerme a escribir cada día durante horas para aislarme y sumergirme en esa realidad paralela a la que te lleva la escritura, o incluso la lectura, porque es como si leyera una novela, no sé lo que va a pasar, la historia se va construyendo palabra a palabra, línea a línea, página a página. Cuando llego al final comienzan las relecturas, y aquí ya conozco muy bien a los personajes, sé lo que les pasa y entiendo su historia, y en cada relectura afino sus modos, los diálogos, su forma de actuar… Esa es mi forma de escribir…

AG. ¿Hay algún personaje que tenga más protagonismo del que inicialmente tenías pensado?

PSG. Muchos, Villanueva, la señora Blumenfeld, Axel Laufer… Son personajes que se hicieron fuertes a medida que la historia avanzaba.

AG. ¿Se puede considerar que tu novela es una novela de amor? No me refiero al amor romántico, sino a toda clase de amor, maternal, de amigo, filial, de pareja…

PSG. Es una novela de amor en tiempos revueltos, de amor y amistad, porque esos sentimientos ennoblecen a ser humano, y le ayudan a sobrevivir en tiempos devastadores.

AG. Hay escenas durísimas, aunque necesarias. ¿Sufres al escribirlas tanto como el lector al leerlas?

PSG. Me emociono al escribirlas y al releerlas.

AG. ¿Podemos darnos cuenta, al leerte, que debemos aprender de nuestros errores?

PSG. Deberíamos, de lo contrario estamos abocados a repetirlos, pero no por leerme a mí, sino por leer en general, porque la lectura nos hace críticos y nos facilita la capacidad de opinión y criterio que puede evitar errores cometidos en el pasado.

AG. Aunque el protagonista es Yuri Santacruz, ¿no crees que es una novela de mujeres?

PSG. No haría yo esa distinción, las mujeres formamos parte de la sociedad, para bien y para mal, es una novela en la que hombres y mujeres sufren, cada uno a su manera, una época terrible que condicionó su vida, su capacidad de amar, de decidir sobre su manera de actuar y de caminar por la vida.

AG. En todas las guerras, las mujeres somos un botín. En la actualidad, dependiendo de las culturas, seguimos igual. ¿Se podrá acabar con esta lacra?

PSG. Es difícil, porque hay culturas y religiones muy arraigadas y que hacen complicado revertir la situación. Sí podemos y debemos intentarlo en nuestro entorno, en el que ya hemos conseguido mucho en estos últimos años; proteger los avances, los derechos, no creernos que nos vienen impresos en el ADN, ser conscientes de lo importante que es para una sociedad que todos tengamos las mismas oportunidades y la capacidad para decidir sobre nuestro propio destino sin estar condicionados por leyes o costumbres discriminatorias o por prejuicios más opresivos a veces que las propias leyes.

AG. Aunque estás inmersa en la promoción de Últimos días en Berlín, ¿qué proyectos tienes?

PSG. Escribir mi mejor novela.

AG. Para La sospecha de Sofía, tu hijo hizo una maravillosa banda sonora. ¿Está haciendo algo similar para esta última novela?

No, en esta no ha tenido tiempo para crear.

AG. ¿Hay algo que te apetezca contarles a nuestros lectores?

PSG. Pues que sin su lectura mis personajes estarían huérfanos.

AG. Muchas gracias, Paloma. Ha sido un placer.

Almudena Gutiérrez